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Bienvenid@s a mi blog Los libros de Baker Street. En este post vamos a hablar de Un lugar desconocido de Seicho Matsumoto. Está publicado en 2021 por la editorial Libros del Asteroide, tiene 256 páginas y la traducción del japonés es de Marina Bornas. Se publicó originalmente en 1975 y es un clásico de la novela negra.
Seicho Matsumoto nació en 1909 en la Prefectura de Fukuoka (Japón) y murió en 1992 en Tokio. Este escritor, comenzó a publicar cuando ya tenía más de cuarenta años, pero su carrera no despegó hasta su segundo libro, cuando recibió el premio Akutagawa por Historia del diario de Kokura (1952). Matsumoto recibió alguno de los más prestigiosos premios literarios de su país y está considerado uno de los principales escritores japoneses de novela negra.
La sinopsis de Un lugar desconocido nos dice:
<<"Durante un viaje de negocios en Kobe, Tsuneo Asai recibe la noticia de que su esposa Eiko ha fallecido de un infarto. Como Eiko sufría una enfermedad coronaria, la noticia no le habría resultado extraña si no fuera por el lugar donde ocurrió: un barrio alejado de Tokio que no frecuentaban y en el que abundan los hoteles por horas. Intrigado, Asai indagará e intentará averiguar las verdaderas circunstancias de su muerte. ">>Seicho Matsumoto
La historia comienza cuando Tsuneo Asai se encuentra de viaje de negocios en la ciudad de Kobe. Asai es el encargado jefe del departamento de Alimentación del Ministerio de Agricultura y Silvicultura y acompaña en este viaje al director general, el señor Shiraishi, que por lo que nos dicen había llegado a ese puesto hacía solo un mes y no sabía nada sobre gestión de alimentos. Asai, un veterano en el Ministerio, es la "cabeza pensante" y el que lleva a cabo los negocios y vemos como para él es muy importante ese trabajo, de hecho ser funcionario en Japón es casi un privilegio, aunque no tenga un cargo directivo, puestos que están reservados para los que tienen estudios superiores. En toda la novela este puesto de trabajo de Asai va a tener un papel importante, e incluso antepondrá a veces su trabajo a sus problemas personales.
Pues la noche de los hechos, Asai está reunido con algunos empresarios locales para celebrar una velada informal cuando recibe una llamada telefónica de su cuñada Miyako que le dice que su esposa Eiko ha muerto de forma repentina por un paro cardiaco. Asai se marcha precipitadamente a Tokio, no sin antes dejar arreglados algunos asuntos de su trabajo. Sorprende ese empeño de anteponer los intereses de su trabajo ante una noticia como la que acaba de recibir.
Eiko y Asai se casaron hacía siete años. Eiko era la segunda esposa de Asai y nos hablan de ella como una joven caprichosa, ociosa y cambiante. Tenía una enfermedad cardiaca, por lo que en los últimos años llevaba una vida tranquila y sin sobresaltos.
El día que murió, Eiko se encontraba en un barrio residencial adinerado en la zona de Yoyogi. Murió en una tienda de cosméticos muy exclusiva (y muy cara) y todo esto a Asai le resulta un poco extraño.
Pasados los funerales, Asai y su cuñada Miyako van a la tienda donde murió para agradecer a la dueña la ayuda prestada a Eiko, pero en realidad Asai lo que busca es reconstruir los últimos pasos de su esposa.
En la exclusiva tienda, la dueña les dice que Eiko entró en su negocio encontrándose mal y ella avisó a un médico que tenía su consulta en las proximidades, pero cuando llegó solo pudo certificar su muerte.
Asai, en los ratos que no está absorbido por su trabajo, se dedica a recorrer la zona de Yoyogi en busca de alguna pista de qué hacía su esposa en ese barrio, y sus sospechas empiezan a crecer cuando se da cuenta que esa zona está llena de hoteles de citas.
Comienza una investigación profunda del barrio y de sus habitantes, contratando incluso los servicios de una agencia de detectives para reconstruir las últimas horas de la vida de su esposa.
Se ve inmerso en un mundo de mentiras, dobles vidas y miedo al escándalo, guardando siempre las apariencias y llevando su investigación y los resultados en el más estricto de los secretos. Impacta la soledad en la que se encuentra Asai en toda la novela, no puede confiar en nadie y a nadie parece importarle mucho lo que haga, la verdad. Vive solo, investiga solo, recorre los escenarios solo, las hipótesis que se forma no las puede contrastar con nadie y las decisiones que toma, más o menos acertadas, las lleva a cabo en la mas estricta soledad. Está rodeado de gente que no ve más allá de su fachada. Esto te crea una ansiedad por ayudarle y aconsejarle muy bien construida por parte del autor.
Lo que descubre, le dejará "de piedra" y se producirá un giro más allá de la mitad de la novela que lo cambiará todo.
La primera parte de la novela es lenta, algo repetitiva ya que te expone los mismos hechos una y otra vez, no sé si con la intención de que lo entiendas bien y sigas los pensamientos del protagonista. Pero una vez que se produce el "giro" que mencionaba antes, se vuelve mucho más dinámica y te mantiene en tensión hasta el inesperado (o no) desenlace.
Es una novela algo cambiante, va despacio al principio y luego toma carrera en su segunda mitad, pero es entretenida de leer, y además de la trama principal, es curioso ver como se desarrolla la vida en el Japón de los años 70 del siglo pasado, sus creencias y sus costumbres.
Pues no se puede contar mucho más de esta historia sin entrar en el terreno de los spoilers, porque lo verdaderamente impactante lo tendremos que descubrir con la lectura del libro.
Le puse 3.5 estrellas en Goodreads. Parece una nota un poco baja, pero es que le cuesta "arrancar" y te deja todo lo bueno para el último tercio del libro. Aún así, me ha gustado su lectura, y como muestra os dejo otra recomendación de este autor que leí hace ya algún tiempo.
El libro que recomiendo es El expreso de Tokio publicado en 2014 por Libros del Asteroide, traducido también por Marina Bornas y que tiene 220 páginas.
Os cuento: "Los cadáveres de un oscuro funcionario y de la camarera de un restaurante de Tokio son descubiertos en una playa de la isla de Kyushu. Todo parece indicar que se trata de un caso claro: dos amantes que se han suicidado juntos tomando cianuro. Pero algún detalle extraño llama la atención del inspector Mihara: el difunto se había pasado seis días solo en su hotel y en su bolsillo encontraron un único billete de tren; los amantes no habían viajado juntos. Resulta también que el funcionario trabajaba en un ministerio en el que un escándalo de corrupción está a punto de estallar."
Y hasta aquí la reseña de hoy. Dejarme en comentarios si os ha llamado la atención este libro o si habéis leído algún otro de Matsumoto.
Sin más, me despido. Un saludo y hasta el próximo post 😉.
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